El inicio de la maniobra se produce una vez que hemos elegido el punto donde vamos a realizarla: una sección en la que podamos golpear al labio y que nos proyecte hacia arriba y hacia afuera. Lo ideal sería un buen codo, pero eso no siempre es posible.

Para realizar el invertido es importante llevar velocidad, porque cuanto mayor es esta más se vuela, y el invertido necesita un poco de altura para hacerlo correctamente. La forma de subir al labio es practicamente la misma que para el resto de aereos, quizá en el invertido se hace de una manera un poco más vertical. Una vez se golpea el labio se hace un giro y se lleva el bugui lo más alto posible, como si quisieras enseñarle a las gaviotas los canales. Lo ideal es que el tail o cola esté ligeramente más alta que el nose.

La cabeza es la que dirige el movimiento. Si bien en el rollo la cabeza gira completamente para que también lo haga el cuerpo, en el invertido una vez la tabla está lo más alta posible vuelve a mirar a donde queremos aterrizar, deshaciendo el movimiento. La espalda se arquea subiendo la cadera y las piernas también ayudan a volver a la posición normal y aterrizar